Acciones de mitigación y adaptación

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Acciones de mitigación y adaptación

Gestión de masas forestales en fase de regeneración post-incendio

Principales servicios eco-sistémicos de análisis: regulación del clima y regulación hídrica.

La gestión forestal en la fase de regeneración post-incendio es clave para maximizar la productividad futura de un bosque y dotarlo de mayor resistencia para hacer frente a nuevos incendios y episodios de sequía. Las acciones se centran, especialmente, en estructurar el bosque para asegurar y potenciar su crecimiento futuro.

Las principales masas forestales en la que se ha incidido son las siguientes y suman un total de 28,3 hectáreas:

  • Can Salvi: 6,5 ha de alcornoque (Quercus suber) en la UP Els Aspres.
  • Can Bech: 5 ha de alcornoque (Quercus suber) en la UP Els Aspres.
  • Els Pins Verds: 4,4 ha de pino carrasco (Pinus halepensis) en la UP El Montmell.
  • Soler d’en Jaumàs: 2 rodales con 1,4 ha de pino carrasco (Pinus halepensis) y 1,8 ha de pino salgareño y quejigo (Pinus nigra y Quercus faginea) en la UP Replans de Berguedà.
  • Viladasses: 5,4 ha de quejigo (Quercus faginea) en la UP Replans de Berguedà.
  • La Cortada: 2 rodales con un total de 3,8 ha de pino silvestre, quejigo y encina (Pinus sylvestris, Quercus faginea y Quercus ilex) en la UP Replans de Berguedà.

Se ha seleccionado un tipo de modelo silvícola para cada uno de los diferentes rodales en función de las orientaciones de gestión forestal sostenible de Cataluña (ORGEST) que varían en función de la especie principal.

En general, el objetivo de las acciones ha sido reducir la densidad de pies de la masa para que los árboles tengan más capacidad de crecimiento gracias a no tener que competir por los recursos (agua, luz, nutrientes, etc.). Seleccionamos aquellos árboles que tienen una capacidad de crecimiento potencialmente más alta, y esta selección, sumada a la reducción de densidad, implica un mayor crecimiento de los árboles remanentes, que implica a su vez una mayor capacidad de absorción de carbono. 

Se realiza una mejora de la estructura arbolada con el fin de reducir la vulnerabilidad al fuego de copas y disminuir, pues, el riesgo de incendio a medio plazo.

Mantener la biodiversidad es uno de los puntos clave de nuestro proyecto y que aseguramos en este tipo de intervenciones para que alcancen niveles más elevados de biodiversidad potencial a medio o largo plazo. Debe ser a medio o largo plazo, ya que, al tratarse de masas incipientes o jóvenes, los valores de biodiversidad potencial son, a priori, bajos.

Ejemplo del resultado de los trabajos de implementación en el rodal de pinos verdes, en una masa de pino carrasco post-incendio, antes y después de las actuaciones silvícolas; clareo.

Gestión forestal en masas adultas

Principales servicios ecosistémicos de análisis: regulación del clima, regulación de agua (eficiencia en el uso del agua y disponibilidad hídrica) y biodiversidad.

Una gestión forestal climáticamente inteligente permite que masas forestales adultas que, en caso de abandono podrían situarse en punto de estancación de crecimiento, pasen a potenciar la generación de diferentes productos como la biomasa, la madera o el corcho. La selección y aplicación del tratamiento silvícola adecuado hará que esta masa forestal permita una mayor fijación del carbono, consuma agua de forma más eficiente y sea capaz de seguir acogiendo biodiversidad en el mismo nivel.

Las actuaciones se han llevado a cabo en un total de 39,34 hectáreas:

  • Can Bech: 5,1 ha de alcornoque (Quercus suber) en la UP Els Aspres.
  • Can Budó: 4,3 ha de alcornoque (Quercus suber) en la UP Els Aspres.
  • Aiguaviva: 4 ha de pino carrasco (Pinus halepensis) en la UP El Montmell.
  • Cal Marimon: 4,4 ha de pino carrasco (Pinus halepensis) en la UP Serres d’Ancosa.
  • Can Vich: 3,8 ha de pino carrasco (Pinus halepensis) en la UP Serres d’Ancosa.
  • Vallcebre: 3,64 ha de pino silvestre (Pinus sylvestris) en la UP Capçaleres de Llobregat.
  • Santa Maria de les Garrigues: 5 ha de pino silvestre (Pinus sylvestris) en la UP Capçaleres de Llobregat.
  • Confós: 4,8 ha de pino salgareño (Pinus nigra) en la UP Vall de Rialb.
  • Sardanyés: 4,3 ha de pino silvestre (Pinus sylvestris) en la UP Vall de Rialb.

Pinares de pino carrasco (P. halepensis) en la UP Montmell y UP Serres d’Ancosa 

Bosques de pino silvestre (P. sylvestris) en la UP Capçaleres del Llobregat 

Bosques de pino silvestre y pino salgareño (P. nigra) en la UP Vall de Rialb

Alcornocales en la UP Els Aspres

Hemos seleccionado la aplicación de cada modelo silvícola en función de la especie principal existente. En general, los objetivos que hemos buscado en todas las actuaciones han sido los siguientes: potenciar el crecimiento de los árboles con más potencial, que implica una mayor fijación de carbono, así como mejorar la estructura arbolada para reducir la vulnerabilidad ante incendios.

Para aumentar la resistencia a posibles incendios, en aquellos rodales en que ha sido necesario, hemos actuado sobre el combustible de escala para romper la continuidad, ya sea vertical u horizontal.

Hemos actuado sobre rodales donde la eficiencia del consumo de agua era uno de los objetivos principales, y en estos casos hemos aplicado cortas de árboles más intensas para reducir de forma más notoria el consumo de agua, favoreciendo el crecimiento potencial de los árboles remanentes, que no tendrán que competir por los recursos hídricos y presentarán una consecuente mayor fijación de carbono.

Hemos fomentado la biodiversidad de estas masas forestales conservando elementos que aportan altas capacidades de acogida como árboles de gran diámetro o árboles con dendromicrohábitats, así como la creación de madera muerta. Estos elementos presentan una  alta capacidad de acogida de biodiversidad.

Forestaciones: plantaciones forestales y agroforestales

Incrementar la superficie arbolada y su biomasa: éstas son las principales virtudes de la forestación, la práctica forestal mitigadora más utilizada a escala mundial.

En LIFE Climark la ponemos en práctica con un objetivo en el horizonte: garantizar la sostenibilidad ambiental y socio-económica de estas actuaciones. Esto es posible si antes de ponerla en práctica se valora la idoneidad en función de las especificidades de cada territorio.

Hemos realizado la forestación en un total de 7 rodales, con una extensión total de aproximadamente 25 hectáreas:

  • Can Geli de Buscarós: 1 ha de campo de cultivo en la UP Els Aspres.
  • Les Gatelletes: 1,1 ha de campo de cultivo en la UP El Montmell.
  • Clos Costela: 1,5 ha de pinar de pino carrasco al margen de cultivos en la UP Serres d’Ancosa.
  • Can Sabater de Puigcaní: 4 ha de pinar de pino carrasco con claros en la UP Serres d’Ancosa.
  • Pla de l’Oliva: 2 ha de robledal post-incendio en la UP Vall de Rialb.
  • Can Buscatell: 9,1 ha de campo de cultivo.
  • Can Català: 1,51 ha de campo de cultivo.

UP Replans del Berguedà

UP Els Aspres

UP Vall de Rialb

Vidreres (la Selva)

La forestación que hemos llevado a cabo se ha centrado en terrenos de cultivo que estaban en desuso y bosques que contaban con densidades bajas. Hemos estudiado cada caso para determinar:

  • Especie y marco de plantación más adecuados.
  • Tratamientos previos a realizar.

Si bien el principal objetivo de estas actuaciones es aumentar la fijación de carbono a medio y largo plazo gracias a aumentar la densidad arbolada, en cada caso siempre hemos tenido en cuenta la combinación de intereses tanto ambientales como económicos. Por ejemplo, optamos por la plantación de pino piñonero para poder obtener una buena fijación de carbono y producción de piñones.

En el caso de plantaciones de enriquecimiento, actuación sobre masas forestales de baja densidad, la mejora de la biodiversidad ha sido notoria gracias a la plantación de nuevas especies de árboles, lo cual ha contribuido a una mayor diversidad de aquel rodal.

Prácticas de gestión forestal con impacto en el balance del carbono en el suelo

Indicador general sobre el que se actúa principalmente: carbono.

Los suelos forestales tienen un papel positivo en la acumulación del carbono. Es en este punto donde se centra esta acción: concretamente en determinar el papel de la gestión forestal en la capacidad de almacenamiento de carbono.

Esta acción nos permite responder a dos preguntas clave:

  • ¿Cuánto carbono se incorpora en el suelo cuando se descomponen las hojas y la leña?
  • ¿Hasta qué punto la calidad del material en descomposición (hojas y leña procedente de diferentes especies) explica las diferencias entre la relación de los flujos de carbono de la atmósfera en el suelo?

Flujo de carbono de la leña al suelo

Desde LIFE Climark hemos analizado tres parcelas cerradas de pino salgareño. Contábamos con dos especies de árboles y 3 diámetros de tronco. Además de los registros de troncos recientes, también hemos incluido registros de 4 años de madera parcialmente quemada. Cada residuo se colocó sobre una capa de 5 cm de profundidad de suelo empobrecido en términos de carbono.

El objetivo principal era cuantificar el carbono que se incorpora en el suelo cuando se descompone la madera.

Relación entre la calidad del material en descomposición y el carbono incorporado en el suelo

En este estudio, evaluamos la diferencia de carbono transmitido al suelo en función de:

  • Especies de las hojas.
  • Contraste de calidad.
  • Diferencia en el punto de descomposición.

Concretamente, comparamos la descomposición de la hoja verde como resultado del clareo del bosque con la de la hoja que ha caído por causas naturales. Se analizan tres tipos diferentes de hojas.

Estudio de la contribución de carbono de la madera en descomposición de diferentes cualidades en las reserves de carbono del suelo. 

Gestión estratégica de prevención de incendios forestales

Indicador general sobre el que se actúa principalmente: carbono. 

La mayoría de UP seleccionadas se encuentran en zonas con incidencia de incendios forestales, hecho que compromete el almacenamiento del carbono que se ha fijado a lo largo del tiempo y que puede desaparecer rápidamente si no se toman medidas de prevención de incendios forestales.  

Hemos configurado el modelo de propagación de incendios, que está prácticamente calibrado para lanzar el modelado de incendios de larga distancia en las diferentes unidades de paisaje del proyecto. Los resultados del modelado prevén: 

  • La intensidad del fuego. 
  • La probabilidad de incendio para los diferentes escenarios. 
  • Facilitan la evaluación de las diferentes emisiones de carbono esperadas entre los diferentes escenarios en función de si la zona ha sido o no tratada. 

Paralelamente al modelado de incendios, estamos cuantificando el carbono susceptible de ser quemado en nuestras unidades de paisaje, así como dónde está localizado. 

Concretamente, estamos desarrollando las siguientes herramientas:  

  • Cartografía precisa a nivel de rodales teniendo en cuenta los gradientes de las especies arbóreas dominantes en la cubierta y la altura del rodal. 
  • Información de la estructura a nivel de rodales a partir de los datos generados en el 4º Inventario Nacional Forestal para poblar los rodales pertinentes. 
  • Estudios de campo, es decir: inventarios o muestras para hacer una estimación de la cantidad de carbono almacenado en hojas, desechos, biomasa muerta y biomasa viva en el suelo. Estos datos complementan la información de la estructura con ciertos valores de referencia. 

LIFE CLIMARK (LIFE16 CCM/ES/000065) es un proyecto LIFE de Mitigación del Cambio Climático, cofinanciado por el Programa LIFE de la Unión Europea.

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